JOSÉ MARÍA MORELOS, Q. Roo.- La situación no pinta nada bien para los taxistas, en especial, los de la zona maya de Quintana Roo, quienes en cuatro años han mantenido casi la misma tarifa, mientras los gasolinazos vuelven a ponerse de moda y el Covid-19 añade otros elementos.
“Nosotros en cuatro años no hemos tenido un aumento, a nosotros nos tienen atados prácticamente de las manos, no podemos darnos esa libertad porque empiezan las quejas, además, con la pandemia, peor la economía del trabajador, y de todos”, anotó Wilberth Canul, quien aún intenta vivir de la “taxeada”.
El chafirete explicó que la demanda desplomó, disminuyeron las salidas foráneas, además, se redujo el número de pasajeros que pueden transportar, como parte de los efectos de la pandemia. “En vez de aumentar las salidas se van disminuyendo y el número de pasajeros también disminuye, entonces, así que ahorita, no es redituable para nosotros los transportistas, por la gasolina que está cara”, destacó.
Sin embargo, reconoció que aumentar el precio del pasaje no es por el momento la salida, pues la sociedad busca a toda costa economizar, observó, quizá sí sería prudente permitir que transporten un mayor número de pasajeros por viaje.
Conductores piden diseño de estrategias
El municipio de José María Morelos se encuentra en el centro del estado y junto con Felipe Carrillo Puerto, son los que no tienen movimiento turístico, y dependen únicamente de la poca afluencia de personas que viajan entre la capital del estado y la ciudad de Mérida, Yucatán.
En contraste, los demás municipios, principalmente los del norte del estado, mantienen movimiento, sobre todo de visitantes extranjeros, lo que de alguna manera genera algo de derrama. Ante esa situación, los taxistas consideran importante diseñar otras estrategias que permitan a los habitantes de esa zona sobrevivir a los estragos del coronavirus.