El triunfo de Morena en dicho municipio fue por “la marca”, no por el candidato. No es restarle mérito y capacidad a la presidenta municipal electa, Yensunni Idalia Martínez Hernández, quien “arrastró” en las urnas fue Luis Gamero Barranco, quien por cierto todavía no digiere su destitución, a juicio, inclusive al interior de Morena, excesiva.
Los pecados de la senadora Maribel Villegas Canché fueron la causa de esa destitución. Y es que sus intentos por usurpar de manera anticipada la Presidencia Municipal de Benito Juárez, con miras a la sucesión gubernamental, le han llevado a quedar cada vez más rezagada y abandonada por quienes le respaldaban.
Sin embargo, insoslayable omitir que las derrotas dejan aprendizajes. Esto es claro en el caso de la senadora con licencia, Mayuli Martínez Simón, otrora coordinadora estatal de la Alianza conformada a nivel nacional por los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI), y de la Revolución Democrática (PRD); que a nivel estatal se reconfiguró como “Va por Quintana Roo”, a la cual se incorporó Confianza por Quintana Roo.
Su experiencia como política, diputada local, regidora, abogada e inclusive, madre de familia, le permitió conducir, sino con perfección, si con habilidad política en el andar de la Coalición en los 11 municipios.
Los triunfos en Solidaridad e Isla Mujeres ratificaron que el PAN es la segunda fuerza política en la entidad. La colaboración del PRI llevó a la victoria en Bacalar. Estos municipios van en constante desarrollo y mayor crecimiento económico.