Por  Eduardo Camacho Rivera

Al menos que ocurra algo por demás extraordinario durante este sábado, Rafael Marín Mollinedo quedó fuera de la contienda interna de Morena para obtener la candidatura a la gubernatura de Quintana Roo.

Las expectativas en torno a este ya conocido cercanísimo personaje a Andrés Manuel López Obrador, crecieron enormemente en las últimas semanas. Se le consideraba como el predilecto para agenciarse la postulación del partido guinda a fin de buscar en las urnas el más importante cargo político en la entidad.

Pero desde la noche de ayer viernes empezaron a circular las versiones periodísticas en el sentido de que decidió no inscribirse, a petición de su propio jefe AMLO.

La importancia de esta negativa es que Marín Mollinedo reencarnaba la posibilidad más solida para frenar las pretensiones de la cuestionada presidenta municipal de Benito Juárez, Mara Lezama, quien sí se registró e hizo público de inmediato el hecho.

Otros personajes más que se inscribieron son José Luis Pech Várguez, el Dr. Manuel Aguilar Ortega, Luis Alegre Salazar y, aunque usted no lo crea, Laura Beristain Navarrete, quien recién perdió la elección para reelegirse al frente del municipio de Solidaridad, tras un muy tortuoso desempeño y bajo una lluvia de acusaciones y señalamientos por diversos y graves presuntos ilícitos.

De última hora, trascendió que ya también Marybel Villegas Canché concretó su registro, por lo que ya son siete las y los aspirantes a obtener la postulación a la gubernatura, cuando la convocatoria establecía que sólo serían cuatro los inscritos.

Se ha dado a conocer que otros personajes como el abogado Rafael Ojeda y el activista Alfredo Kanter Culebro, por igual lograron inscribirse.

Este importante proceso interno de Morena ha transcurrido con un gran hermetismo y, en consecuencia, han surgido todo tipo de especulaciones. Se supone que siendo Morena el partido de la 4T, este tipo de ejercicios deberían ser ejemplarmente transparentes y democráticos.

Empero, lo más relevante de esta contienda interna es, insistimos, la ausencia de Marín Mollinedo, sin que tampoco deje de sorprender la irrupción de Laura Beristain y Marybel Villegas, quienes junto a Mara Lezama integran una tercia que -dicho esto sin absolutamente ninguna carga sexista- ha generado frecuentes escándalos, señalamientos, rechazo social y repudio.

Así las cosas en Morena, en Quintana Roo.

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