Las acciones de Facebook Inc, la mayor compañía de redes sociales, cayeron con fuerza el lunes ante una masiva interrupción de servicios en sus plataformas Facebook, WhatsApp e Instagram. Las acciones de la compañía en Wall Street perdieron -4.89% y cerraron con un precio de 326.23 dólares.

El fuerte movimiento en los papeles de Facebook se presentó en un día por sí mismo rojo para las acciones estadounidenses, y principalmente para las tecnológicas, que llevaron al índice Nasdaq a caer -2.14 por ciento. Entre los componentes más relevantes, la firma de redes sociales fue el peor.

Comparado con un cierre previo en 343.01 dólares, el registro de hoy para los papeles de Facebook representó una pérdida de 16.78 dólares por cada acción. Con un total de 2,340 millones 824,544 papeles, el movimiento dejó una pérdida de más de 39,000 millones de dólares en capitalización.

Facebook y sus plataformas tuvieron una interrupción que afectó a decenas de millones de usuarios. Esto ocurrió un día después de la aparición en televisión de una extrabajadora que filtró a autoridades de Estados Unidos documentos de presuntos daños en la salud mental de los niños debido a Facebook.

“Estamos conscientes de que algunas personas están experimentando algunos problemas con WhatsApp en este momento. Estamos trabajando para que todo vuelva a la normalidad y enviaremos actualización aquí lo antes posible. ¡Gracias por su paciencia!”, decía el aviso de Whatsapp desde Twitter.

A esto se suma que, los títulos de las compañías tecnológicas tuvieron un día negativo en general, porque los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense avanzaron en la anticipación del mercado a la posible disminución de los estímulos de la Reserva Federal (Fed) a la economía.

Cabe mencionar que Facebook arrastra una considerable pérdida acumulada en un corto periodo. Desde el máximo nivel que alcanzó su acción a principios de septiembre, con un techo de 384.33 dólares, ha perdido 58.10 dólares, que son equivalentes a una caída de -15.11 por ciento.

jose.rivera@eleconomista.mx

Fuente: El Economista.

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